Después del par de Sub-Campeonatos de los Guerreros, el equipo verdiblanco tendría un enorme reto personal e institucional a vencer, el cual, pasó desapercibido en el Clausura 2011.
Todo parecía indicar que el Clausura 2011 estaría lleno de ánimo y crecía la esperanza de que los Guerreros se levantarían de un año difícil, al no poder quedarse con la corona de campeón consecutivamente. Los aficionados al equipo verdiblanco mas allá de los sub-campeonatos mostraba fidelidad al equipo, levantando la cara en lo mas alto y a la ves defendiendo el honor Guerrero.
Al inicio del Clausura 2011 invadió rápidamente con noticias donde el Club Santos Laguna empezó a mostrarnos una faceta que no esperábamos. Jared Borgetti se retiraría del fútbol mexicano al no darle la oportunidad por parte del Calub Guerrero de despedirse ante su afición jugando. Luego la directiva apostaría a la continuidad prácticamente con la misma base de jugadores para el arranque del torneo 2011, ahí indicaba el inicio de un mal torneo.
El equipo Lagunero llegó a ligar siete encuentros consecutivos con derrota en el torneo local y concachampios, con estos resultados se dió el cese del argentino Rubén Omar Romano donde era eminente que ya no había entendimiento tanto con la directiva ni con jugadores, a pesar de todo eso, al fin de cuentas no era para que las cosas se dieran tan mal.
Se pierde el sueño de ir a un mundial de clubes, la llegada de un DT sin experiencia pone a pensar a los medios de comunicación y aficionados que el equipo pierde el rumbo. Diego Cocca llega a imponer dirección a un equipo desalineado.
Otro tema importante en el paso del Clausura 2011 fue cuando invadieron las lesiones al cuadro lagunero, donde jugadores clave para el equipo quedaron fuera de algunos encuentros que lastimosamente al final pesaron los puntos dejados.
No solo se trata del fracaso de no ir a la liguilla del Clausura 2011 ni que el equipo queda fuera de la Concachampions, se trata que el Club desde un inicio no hizo una planeación adecuada para llegar con buenas armas a la posible liguilla. Aquel equipo que se presumía de una gran fortaleza hoy tiene mas huecos que nunca; Una defensa perdida, Una media cancha que era clave y siempre se presumía de creatividad, la delantera donde el arma letal de los guerreros se imponía en cada cancha, ahora es un caso perdido.
Seguramente todos nos preguntamos, ¿Donde está el equipo que en los últimos años fue un protagonista en el fútbol mexicano? ¿Donde quedó la cancha del dolor ajeno? ¿Donde quedaron los jugadores que luchaban y sudaban la camiseta verdiblanca? Tal ves la respuesta no la tenga, pero de algo estoy segura; el equipo nos tenía mal acostumbrados a los buenos resultados.
Simplemente el Clausura 2011 fue obscura para todos, donde teniendo una de las mejores nominas del fútbol mexicano ni siquiera alcanzó para entrar a la Liguilla. Habrá que analizar lo que se hizo y dejó de hacer a principios de torneo, para así revindicarse; porque recuerden que si a alguien le salieron a deber es a la AFICION.
Dicen que de los errores se aprende, creo que no es tarde para enmendar nuevos retos y adjudicar compromiso. De todo lo malo del Clausura algo debió aprenderse, porque bien dicen que el hombre es el único ser humano que tropieza con la misma piedra en dos ocasiones, esperemos que este no sea el caso.
Tenemos una región tan rica en cultura, una afición que a pesar de los malos resultados en el torneo siempre estuvo a pie del cañón, ellos al final de cuenta son los que hacen la historia en conjunto con el equipo, porque el equipo es de todos.
No hay sino una regla verdadera de progreso: supérate a ti mismo. Por ello tomemos conciencia, tanto jugadores, directiva, cuerpo técnico y afición; recordemos que el sueño sigue, y habrá que regresar la confianza haciendo bien las cosas desde el inicio. Que este Clausura tan solo se cierre en que fue una mala etapa en la historia verdiblanca y démosle la vuelta a la hoja, pero antes no olvidemos nuestras raíces y la enseñanza que deja el fracaso.
Todo parecía indicar que el Clausura 2011 estaría lleno de ánimo y crecía la esperanza de que los Guerreros se levantarían de un año difícil, al no poder quedarse con la corona de campeón consecutivamente. Los aficionados al equipo verdiblanco mas allá de los sub-campeonatos mostraba fidelidad al equipo, levantando la cara en lo mas alto y a la ves defendiendo el honor Guerrero.
Al inicio del Clausura 2011 invadió rápidamente con noticias donde el Club Santos Laguna empezó a mostrarnos una faceta que no esperábamos. Jared Borgetti se retiraría del fútbol mexicano al no darle la oportunidad por parte del Calub Guerrero de despedirse ante su afición jugando. Luego la directiva apostaría a la continuidad prácticamente con la misma base de jugadores para el arranque del torneo 2011, ahí indicaba el inicio de un mal torneo.
El equipo Lagunero llegó a ligar siete encuentros consecutivos con derrota en el torneo local y concachampios, con estos resultados se dió el cese del argentino Rubén Omar Romano donde era eminente que ya no había entendimiento tanto con la directiva ni con jugadores, a pesar de todo eso, al fin de cuentas no era para que las cosas se dieran tan mal.
Se pierde el sueño de ir a un mundial de clubes, la llegada de un DT sin experiencia pone a pensar a los medios de comunicación y aficionados que el equipo pierde el rumbo. Diego Cocca llega a imponer dirección a un equipo desalineado.
Otro tema importante en el paso del Clausura 2011 fue cuando invadieron las lesiones al cuadro lagunero, donde jugadores clave para el equipo quedaron fuera de algunos encuentros que lastimosamente al final pesaron los puntos dejados.
No solo se trata del fracaso de no ir a la liguilla del Clausura 2011 ni que el equipo queda fuera de la Concachampions, se trata que el Club desde un inicio no hizo una planeación adecuada para llegar con buenas armas a la posible liguilla. Aquel equipo que se presumía de una gran fortaleza hoy tiene mas huecos que nunca; Una defensa perdida, Una media cancha que era clave y siempre se presumía de creatividad, la delantera donde el arma letal de los guerreros se imponía en cada cancha, ahora es un caso perdido.
Seguramente todos nos preguntamos, ¿Donde está el equipo que en los últimos años fue un protagonista en el fútbol mexicano? ¿Donde quedó la cancha del dolor ajeno? ¿Donde quedaron los jugadores que luchaban y sudaban la camiseta verdiblanca? Tal ves la respuesta no la tenga, pero de algo estoy segura; el equipo nos tenía mal acostumbrados a los buenos resultados.
Simplemente el Clausura 2011 fue obscura para todos, donde teniendo una de las mejores nominas del fútbol mexicano ni siquiera alcanzó para entrar a la Liguilla. Habrá que analizar lo que se hizo y dejó de hacer a principios de torneo, para así revindicarse; porque recuerden que si a alguien le salieron a deber es a la AFICION.
Dicen que de los errores se aprende, creo que no es tarde para enmendar nuevos retos y adjudicar compromiso. De todo lo malo del Clausura algo debió aprenderse, porque bien dicen que el hombre es el único ser humano que tropieza con la misma piedra en dos ocasiones, esperemos que este no sea el caso.
Tenemos una región tan rica en cultura, una afición que a pesar de los malos resultados en el torneo siempre estuvo a pie del cañón, ellos al final de cuenta son los que hacen la historia en conjunto con el equipo, porque el equipo es de todos.
No hay sino una regla verdadera de progreso: supérate a ti mismo. Por ello tomemos conciencia, tanto jugadores, directiva, cuerpo técnico y afición; recordemos que el sueño sigue, y habrá que regresar la confianza haciendo bien las cosas desde el inicio. Que este Clausura tan solo se cierre en que fue una mala etapa en la historia verdiblanca y démosle la vuelta a la hoja, pero antes no olvidemos nuestras raíces y la enseñanza que deja el fracaso.
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